¡¡Hay que salir de la apatía!!
Desde que me dedico ( más o menos ocho o nueve años) a reflexionar e indagar por los derroteros de la Comunicación Corporativa, no he encontrado una ocasión más propicia para el relanzamiento de la disciplina que la actual en la que nos situamos. El desarrollo de las webs participativas, con el fomento del diálogo, pone las bases adecuadas para el desarrollo pleno de la disciplina de la Comunicación Corporativa. Pero sin embargo, no veo por ningún lado la predisposición de los comunicadores a entrar en esta nueva dinámica, aunque sea por pura curiosidad intelectual. Están en su derecho. Nadie lo duda, aunque esa decisión sea la equivocada bajo mi punto de vista.
Pero, desde mi perspectiva además, la situación actual, si se me permite, tiene que ver con una de estas dos opciones: o faltan las condiciones para el desarrollo de la Comunicación Corporativa a través de la senda de la denominada web 2.0 (la era de la participación en internet) o realmente lo que ocurre es que estamos dormidos. Los profesionales me refiero.
Mi síntesis, como parece obvio, detecta debilidades y grandezas en las dos opciones citadas. Así, resulta totalmente cierto que los comunicadores tenemos hoy las condiciones necesarias y suficientes para impulsar con ganas la nueva evolución de la Comunicación (crecimiento progresivo del nivel de penetración de internet en la sociedad española, mayor conocimiento popular de los instrumentos informáticos...) aunque no es menos cierto que nuestra sociedad sigue siendo algo reticente a entrar en la era del diálogo, y me refiero en este caso a las empresas principalmente.
También a modo de síntesis no tengo por menos que aceptar que en la profesión se ha oído hablar del fenómeno de los blogs, mas no se sabe cómo incluirlo entre nuestras herramientas. También hay quien prefiere mantener el esquema de trabajo tradicional de la Comunicación por pereza o por exceso de conservadurismo.
Sea por una razón u otra, lo bien cierto es que necesitamos un fuerte zamarreón para espabilar lo suficiente porque afuera (en el mundo anglosajón sin llegar a sacralizar nada) nos llevan varios cuerpos de ventaja a los comunicadores en esto de la web 2.0. A pesar de los pesares.
6 comentarios:
Gran y santa verdad llevas mi estimado Benito. La apatía que reina en nuestro mundo de la comunicación no tiene explicación precisa... sirve, eso sí, ese "apoltronamiento" a no hacer más allá de lo tradicional, pero también es cierto que las nuevas tecnologías (web 2.0) invitan, incitan a lanzarse. Hace falta más comunicación.
Y este comentario viene por que en estos días estoy comprobando lo dificil que es que los comunicadores tanto públicos como privados "salgan del armario" y expresen sus opiniones sobre el mundo de los blogs, el periodismo 2.0 y 3.0, deberían servir como herramientas de gran utilidad para lanzar esa comunicación corporativa, o institucional. La sociedad está ya preparada, no formada, eso sí, pero sí receptiva a esas novedades que las nuevas tecnologías están proporcionando.
La banda ancha, la introducción de internet en los hogares, el manejo de los mensajes blogueros, la rapidez en aprender cómo ir de un enlace a otro está abriendo un camino que cualquier comunicador debería prestar más atención.
Estoy de acuerdo: la sociedad está preparada. Falta lanzarse. Y luego, de otro lado, tenemos el asunto de la baja productividad de este país. Está claro que hay que aplicar las nuevas tecnologías a los viejos procesos. Y en esta línea, la Comunicación es clave,
Casimiro, Benito... perdonad que por una vez haga de "abogada del diablo"... tal vez será que los que mandan en las empresas no quieren avanzar tan deprisa? El otro día leía una información acerca de una nota de prensa multimedia. Enseguida me lancé a investigar y a integrarla en mi modo de trabajo. Pero señores, tengo jefes a los que hay que explicar qué es el RSS!!!! Cómo van a entender lo que es Technorati o Del.icio.us? Opinan que perderé tiempo y lo haré perder al compañero que lleva la web o al diseñador que trabaja con las fotografías o el video.
Aunque también diré que estoy de acuerdo con vosotros en que hay apoltronamiento. Pues claro! Soy una de los 3 periodistas + jefe (no periodista) que hay en mi departamento. Y soy la única que siente un poco de interés por la tecnología. Eso nos da... ¿1 contra 3? Es difícil implantar cosas que los demás no entienden...
Esto María es como la lluvia fina. Parece que no moja mucho, pero al final terminas chopado completamente y la tierra repleta de agua y dispuesta para permitir que germinen las plantas y los árboles.
Vaya que pedazo de lírico que soy.
De otro lado María, he pensado después: ¿si ahora se niegan a saber qué es una RSS, o cómo funciona y para qué sirve Technorati, no sería algo equivalente a unos años atrás, que alguien rechazara el uso del correo electrónico? Quiero decir: hay que comprender una cosa fundamental: ahora,a estas alturas, no se puede replantear la importancia de internet. E internet ahora se llama web participativa. Decir, no yo sí acepto lo de internet, pero me quedo en la web ' de toda la vida' y en el correo electrónico, que es como negarse en un coche a las nuevas mejoras y decir, me conformo con el modelo este que es el de 'toda la vida'. No se sostiene, ¿no?
Evidentemente no se sostiene, Benito, y en eso te doy la razón. Creo, como tú mismo dices, que es lluvia fina y que hay que ir despacito y con calma... el problema es que yo con la tecnología soy muy impaciente, y todo lo que sea una mejora me gusta adaptarlo... el problema es que todos no vamos a la misma velocidad. Hay quien prefiere el coche de 70 cv y el que quiere el de 240 cv. :)
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