Decir una verdad a medias, no es mentir es dar el 50% de la información
Decir una media verdad es dar el 50% de la información disponible, pero no es mentir. Ese es mi punto de vista. Trataré de explicarlo. La tarea de portavoz de una organización no es una tarea fácil. Aparte de lo que supone para la empresa que sus explicaciones sean eficaces o no respecto a lo que se publique, se trata de una actividad que plantea a veces un dilema ético al propio profesional. En ocasiones, y ante situaciones polémicas, el portavoz se puede plantear: ¿estoy diciendo la verdad, o miento?
Respecto a esta cuestión, la clave es bien sencilla: el portavoz debe respetar la lógica de la organización para la que trabaja. Se debe suponer, cosa que por otra parte es normal, que la empresa mantiene un discurso racional y lógico también. El suyo propio.
La tarea del portavoz es decir la verdad de la organización a la que pertenece. En este sentido, no se trata de decirlo o contarlo todo, ya que normalmente, la verdad se suele entender como aquello que el receptor desea o le conviene oir. Y el portavoz debe saberlo para contar aquello que es conveniente respecto a los intereses de una organización, la suya, que se construye a sí misma sobre una base racional como digo. Siguiendo este planteamiento, resulta evidente que, en muchas ocasiones, el portavoz limita lo que cuenta a la parte de un todo, lo que quita valor a ese dicho asumido como implacable de que 'las medias verdades son peores que una mentira'. No estoy de acuerdo: ¿y tú?
Respecto a esta cuestión, la clave es bien sencilla: el portavoz debe respetar la lógica de la organización para la que trabaja. Se debe suponer, cosa que por otra parte es normal, que la empresa mantiene un discurso racional y lógico también. El suyo propio.
La tarea del portavoz es decir la verdad de la organización a la que pertenece. En este sentido, no se trata de decirlo o contarlo todo, ya que normalmente, la verdad se suele entender como aquello que el receptor desea o le conviene oir. Y el portavoz debe saberlo para contar aquello que es conveniente respecto a los intereses de una organización, la suya, que se construye a sí misma sobre una base racional como digo. Siguiendo este planteamiento, resulta evidente que, en muchas ocasiones, el portavoz limita lo que cuenta a la parte de un todo, lo que quita valor a ese dicho asumido como implacable de que 'las medias verdades son peores que una mentira'. No estoy de acuerdo: ¿y tú?
4 comentarios:
Todo es mentira, la verdad
Esta reflexión la hacía Manu Chao en uno de esos gritos contra el mundo, que este fantástico herético lanzaba al aire en una de sus canciones.
Dar el 50 por ciento de la información de un hecho, equivale en la realidad no a una medio verdad, sino a hacer más densa una estela de humo que emborrona la recepción de un conocimiento adecuado del mensaje lanzado.
En estos días, en los que el bombardeo informativo explota en las conciencias de la ciudadanía, aletargándolas y onbnubilizando el horizonte de la realidad, no existe una salida conocida para el receptor.
Tampoco la hay para un periodista subyugado a una empresa en la que los beneficios se anteponen a la elaboración de una información sana y desintoxicada. Transmitir conocimiento no veraz, ni medianamente real, sino sencillamente no masificado, se convertiría en uno de los grandes logros del periodismo del siglo XXI.
La comunicación tiene la misión de acompañar lo que la organización es y hace, y esa misión implica un equilibrio en el manejo de la transparencia.
Ser transparente no solo es "ser transparente" sino también "ser percibido como transparente", y en esta percepción la intención percibida es fundamental. Lo que quiero decir es que los públicos, más que saberlo todo, desean saber lo que es necesario para sus propias existencias. ¿Para qué comunicar riesgos que en lugar de aportar valor confunden el mensaje y le quitan su real misión? La ética va de la mano de la verdad y en nombre de la verdad es que el mensaje debe ser claro y conciso, y evitar ruidos innecesarios en la cadena de transmisión.
Este post, como suele en cierta medida ser habitual en mi, tiene una intencionalidad provocadora. Pero es que además en este caso el hecho es que creo que es patente que en este mundo no existen sólo 'el blanco y el negro': o me mientes o me dices la verdad. Y además va alguien y se inventa eso de que una media verdad es peor que una mentira. ¿Por qué? En mi experiencia familiar( por poner un ejemplo concreto instalado en la vida cotidiana y no en el mundo general) ha habido varios casos de cáncer y he visto como los médicos han ido con el tiempo diciendo progresivamente más parte de la verdad y eso ha sido un seguro para evitar desgarros innecesarios tanto para el enfermo o la enferma como para sus familiares.
La verdad a medias es la peor de las mentiras
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