En internet tenemos derechos y deberes

Leo un documentado reportaje en el País. com titulado: "Colgar' delitos en You Tube se paga". Y aunque el titular induce a pensar que todo el artículo trata sobre el portal de vídeos, lo cierto es que se refiere más bien a una serie de actuaciones delictivas existentes en internet y la manera que hay de perseguirlas. La moraleja de este artículo es, justamente, que es posible detectar a los autores de los delitos, a pesar de que el universo de la red es muy grande e inabarcable.

La lectura de este tipo de trabajos periodísticos me hace cabilar respecto al, pienso, necesario equilibrio entre derechos y deberes. Y es que, finalmente, internet es un escenario más de la actividad humana.

Yo soy el primero que se opone a la aplicación de censuras a internet, como también me opongo a la pretensión de limitar de forma radical las posibilidades que otorga, por ejemplo, la participación en el universo de la web 2.0. Pero claro, como cualquier cosa en que nos fijemos, internet está igualmente sometido a una cruz, que es justamente la de aquellos individuos que de forma impune la utilizan para hacer daño, y casos hay hasta hartarse.

Es muy lamentable que los que buscan hacer daño por un disfrute insano se aprovechen de los amplios márgenes de libertad que nos proporciona la red. Es muy triste, pero lamentablemente ocurre. También es muy descorazonador que algunos piensen en la necesidad de limitar las posibilidades de internet así, sin más, haciendo que este medio pierda su gran capacidad de compartir y comunicar, simplemente por un espíritu censor, muy común en países como Cuba o China.

Finalmente lo que pienso es que debemos aspirar a tener un medio como internet en el que quienes hacen deliberadamente daño respondan. Sin que ello menoscabe ni las propias capacidades de compartir de la tecnología, ni las nuestras como ciudadanos y usuarios a la hora de expresarnos con libertad y, a ser posible, con respeto.